¿Por qué el material POP sigue siendo vital para las marcas?
En una era dominada por lo digital, muchas marcas han descuidado un elemento clave dentro de su estrategia de comunicación en punto de venta: el material POP (Point of Purchase). Lejos de estar obsoleto, el material POP sigue siendo una herramienta poderosa para influir en la decisión de compra justo en el momento más importante: frente al producto.

Stoppers, cenefas, exhibidores, volantes, danglers… todos cumplen una función específica: atraer la atención, destacar beneficios y reforzar el branding en espacios físicos. Y cuando están bien diseñados, pueden aumentar significativamente las ventas por impulso.
En Haathor creemos que el material POP no solo debe ser llamativo, sino estratégico. Un diseño efectivo debe comunicar de forma clara, alinearse con los valores de la marca y ser funcional dentro del espacio disponible. Además, debe considerar el perfil del consumidor, el entorno del punto de venta y los objetivos comerciales.
El material POP también complementa y potencia las activaciones BTL. Una campaña en tienda, por ejemplo, cobra mayor fuerza cuando está respaldada por una ambientación visual coherente que guía al cliente hacia la acción deseada.
Y no olvidemos que el POP también es medible. Con herramientas de auditoría y promotoría, es posible evaluar su desempeño y hacer ajustes en tiempo real.
Invertir en buen material POP es invertir en la última milla del recorrido del consumidor. Porque, al final, puedes hacer una gran campaña en medios, pero si tu producto no destaca en el anaquel… podrías perder la venta.